Cuando todo apuntaba, antes de comenzar el partido, a buscar cómo frenar a un Brasil que venía imparable en ‘su’ Copa América, casi dos horas de acción entre el equipo de Tite y la Selección Colombia se resumen en dos acciones puntuales que acabaron marcando la historia del juego: un golazo de Luis Díaz y una polémica acción que terminó en el empate de Brasil. Lamentablemente, el equipo de Reinaldo Rueda perdió la concentración después de una larga pelea con el juez central Néstor Pitana, se salió de un partido que trabajaba casi a la perfección y terminó perdiendo 2-1..
Después de la sorpresa y de ponerse arriba en el marcador, el equipo
intentó, y con mucho éxito, romper los circuitos ofensivos de los
brasileños. Si bien apostó por la opción más ofensiva como lateral
derecho, Daniel Muñoz, este le demostró al técnico que también puede
cumplir a la hora de marcar. Rueda les pidió sacrificio a todos y todos
corrieron hasta que la gasolina se fue acabando. Delante de la línea de
cuatro en la defensa, Cuadrado y Díaz retrocedían a tapar las bandas y
los dos delanteros se alternaban para entrar y salir, así les costara
trabajo llegar al arco contrario. Y ese operativo de la primera etapa
fue exitoso, porque Brasil llegó muy poco