Para verificar el adecuado funcionamiento de los puntos de Sopas Calientes, el gobernador Victor Manuel Tamayo realizó un recorrido este jueves en cuatro de los 12 puntos, que actualmente funcionan en Dosquebradas.
En compañía de la secretaria de Mujer, Familia y Desarrollo Social el mandatario señaló que esa modalidad del programa de seguridad alimentaria está orientado exclusivamente a personas que simple y llanamente están aguantando hambre.
“Con este programa de Sopas Calientes estamos atendiendo a 2000 personas en Dosquebradas y cerca de 12 mil en todo el departamento, estamos haciendo énfasis en sectores como las invasiones de Dosquebradas y Pereira. En esta oportunidad hemos visitado varios puntos y encontramos una conjugación entre la alegría y la tristeza, como dice el evangelio “dar de comer al hambriento” y la gente queda agradecida pero también genera tristeza porque en muchos casos es la única comida que tienen al día estas personas” expresó Tamayo Vargas.
Sopas Calientes es un alimento preparado en sitio, tipo almuerzo, que corresponde a una minuta formulada por nutricionista e ingeniero de alimentos para dar variedad y balance a cada beneficiario.
Esta modalidad está dirigida a niños y niñas mayores de 1 año, adultos mayores, madres gestantes y lactantes en situación de vulnerabilidad, actualmente se benefician 11209 personas diariamente, de lunes a viernes, quienes está en un ingreso promedio de $415 mil mensuales.
En el barrio La Playita vive con su esposa el señor Anuar Amarilles, un adulto mayor de 77 años de edad y quien debido a una enfermedad está impedido para trabajar y esto expresó del programa “me ha parecido maravilloso porque en realidad me han colaborado bastante ya que mi único ingreso es el subsidio de adulto mayor, yo tengo una hija y ella simplemente me paga el arriendo, ya la comidita es cosa aparte”.
A estas palabras de agradecimiento se sumó Amparo Suarez, una beneficiaria del Barrio Camilo Mejía Duque “que Dios lo bendiga por tanta ayuda para nosotros los pobres, que esa sopa nos sirve mucho a todos porque somos de escasos recursos”.
Los 98 puntos de Sopas Calientes están ubicados en su mayoría en invasiones y zonas más deprimidas de todo el departamento.
Uno de estos puntos está destinado en el barrio Corocito de Pereira para atender a más de 250 habitantes de calle y población migrante y en los próximos días se aperturará uno más en Santa Rosa de Cabal para atender el mismo grupo poblacional.
Otra de las bondades que tiene esta modalidad es la generación de 136 empleos indirectos en la comunidad, donde en su mayoría son mujeres cabeza de hogar que reciben salario por la preparación de estos alimentos. Así lo constató Ana Franceliny Burgos, una de las manipuladoras de alimentos del barrio Álvaro Patiño “darle las gracias por los alimentos y la oportunidad de trabajo, el ingreso me ha servido mucho, me siento súper bien y muy agradecida con el señor Gobernador”.