La emergencia carcelaria es una medida administrativa que se toma en Colombia cuando hay perturbación de la seguridad o riesgo sanitario.
Esta medida permite al Inpec recibir apoyo inmediato de miembros de la Policía o el Ejército cuando se presenten situaciones de alteración del orden dentro de las cárceles.
La emergencia carcelaria también busca reforzar la seguridad en las prisiones del país y aumentar la protección de los guardias del Inpec.
Entre las medidas tomadas en virtud de la declaratoria, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) limitará las visitas y derechos a las comunicaciones de algunos reclusos.
La emergencia también permitirá firmar convenios con la Policía Nacional y el Ejército para aumentar la seguridad en los establecimientos penitenciarios.
Esta medida permite al Inpec recibir apoyo inmediato de miembros de la Policía o el Ejército cuando se presenten situaciones de alteración del orden dentro de las cárceles.
La emergencia carcelaria también busca reforzar la seguridad en las prisiones del país y aumentar la protección de los guardias del Inpec.
Entre las medidas tomadas en virtud de la declaratoria, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) limitará las visitas y derechos a las comunicaciones de algunos reclusos.
La emergencia también permitirá firmar convenios con la Policía Nacional y el Ejército para aumentar la seguridad en los establecimientos penitenciarios.
También se realizarán traslados continuos y aleatorios de personas sospechosas de tener vínculos con la extorsión, como parte de la fase 2 del Plan Dominó, para cortarles cualquier vínculo con la guardia penitenciaria o con los mismos compañeros de prisión.
“Implementaremos todas las medidas, algunas son drásticas de disciplina carcelaria, pero están dirigidas al desmantelamiento de esa estructura La Inmaculada en Tuluá y otras organizaciones y la protección de la vida de la guardia que ha resultado víctima de estos hechos”, afirmó el ministro de Justicia, Néstor Osuna.
