La profesora asesinó a la estudiante con arma blanca en el colegio donde ella trabajaba en la ciudad de Daejeon, en Corea del Sur.
Después de que la familia de la menor reportara su desaparición tras finalizar las clases, ambas, tanto la profesora como la niña, fueron halladas con heridas de arma blanca en la segunda planta del colegio, y es por eso que en un principio la policía sospechó que una tercera persona pudo cometer el ataque.
Los equipos de emergencia transportaron de urgencia a ambas a instalaciones hospitalarias, y la niña, que llegó ya inconsciente, falleció.
La policía explicó después que la maestra, que estaba consciente, confesó haber sido la autora de la agresión y que se autolesionó tras el ataque.
La docente, que tiene entre 40 y 50 años, había obtenido una baja por depresión y había vuelto a trabajar en el colegio en diciembre.
La semana pasada la profesora agredió a una compañera del claustro y el colegio transmitió a la junta educativa local la necesidad de que se le concediera una nueva baja laboral.
La mujer fue operada de sus heridas y la policía ha indicado que la interrogará de nuevo en cuanto se recupere.